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En el año 1850 Jacques Henry fundó un pequeño taller en Marcigny, al sur de Borgoña, Francia. Con gran experiencia, el taller rápidamente comenzó a producir jarras, cafeteras, potes, tazas, banderas y platos. La historia de esta familia de alfareros había comenzado.

Stephen y Delphine son una pareja que después de 10 años de vivir en Londres, se afincaron en el sur de Francia para comenzar una nueva vida y un nuevo negocio. Así surge Cachette, una empresa dedicada a seleccionar y vender productos simples.

Los productos de Chachette se caracterizan por su belleza simple, son objetos funcionales que se pueden utilizar todos los días.

Le Bon Marché se dedica a mejorar la experiencia de compartir con amigos un buen momento alrededor de la mesa, un lugar de encuentro para compartir comida, historias y nuestras vidas.

La empresa realiza una selección de textiles realizadas por artesanos, que utiliza en una gran variedad de productos, desde manteles, hasta servilletas, algunas piezas de indumentaria y bolsos. A estos les suma algunas piezas de mobiliario, accesorios, artículos de regalo y productos de la campiña francesa.

La compañía Appolia nació en el año 2000 buscando renovar formas tradicionales de piezas de cerámica para cocinar, ofreciendo productos funcionales y de colores vibrantes para combinar con la vida contemporánea.

Con un catálogo muy variado de piezas, la compañía ofrece diversos tipos de recipientes para cocinar, desde platos para hornear, hasta bandejas para servir, tarteras, ollas y recipientes especiales para comidas étnicas.

Lo interesante de estos artefactos es que son altamente funcionales, pero además se convierten en un elemento que se puede llevar directamente a la mesa por su bu

Herramientas simples pueden convertirse en los medios para desarrollar la obra de un artista que lleva a su punto cúlmine la pericia y destreza para desarrollar sus múltiples facetas y oportunidades.

Carine Brancowitz ha elegido la birome, o la lapicera biro, como el medio para generar su obra artística.

La buena comida se merece Le Creuset, este es el slogan de esta empresa que ya tiene casi 100 años de historia. La ollas de La Creuset ya son legendarias entre los amantes de la cocina, objetos de culto, y una considerable inversión al momento de adquirirlas.

La Creuset comenzó a producir sus recipientes de hierro con esmalte en el año 1925 en Fresnoy le Grand, Francia.